25 de octubre, día del Profesional Inmobiliario en Venezuela.

En la cotidianidad del corredor inmobiliario, hay una obviedad que fácilmente pasa desapercibida: Nuestra labor no se trata de los inmuebles, se trata de lo que ocurre en ellos.

Lo inmobiliario es el sustrato físico en el que ocurre no solo todo aquello que no es inmueble, ocurre sobre todo lo intangible, ocurre todo aquello que justifica la búsqueda de un inmueble, ocurre todo aquello que nace siendo un propósito y que luego de materializarse se convierte en un recuerdo, y anhelamos que para cada quien sea uno imborrable por lo bueno.

Detrás de cada casa o apartamento que se compre o se alquile hay al menos una persona marcando un hito en su desarrollo, y a éste le seguirán otros hitos cuando en esa casa o apartamento se forme una nueva familia. Este es un gran aporte del corredor inmobiliario, logra que una casa sea una vivienda, logra que sea un hogar. Pero la vivienda por sí sola no es suficiente para albergar a una familia y servir de soporte a sus etapas, una familia y sus miembros deben contar con espacios para satisfacer sus necesidades básicas, para educarse, para distraerse, para llevar a cabo su actividad productiva y de realización personal. Todo esto también es una consecuencia del trabajo del corredor inmobiliario al esmerarse en encontrar el local comercial u oficina ideal para cada necesidad o empresa, hace que los inmuebles se llenen de vida, y que las distintas aristas de la vida se cristalicen en el mejor espacio posible.   

En la correduría inmobiliaria se está tejiendo continuamente el entramado intangible de las familias que florecen y se asientan en una comunidad, y esta a su vez da forma a las ciudades, que a su vez conforman al país. Así es como los profesionales y corredores inmobiliarios construyen un mejor país, ayudando a las familias a vivir felices.

Hoy 25 de octubre, día del Profesional Inmobiliario, queremos extender nuestras felicitaciones a todos nuestros colegas y desearles mucho éxito en esta bonita labor, que seamos capaces de vencer las dificultades que se nos presentan, que cada vez nuestro trabajo sea más gratificante, que seamos cada vez más merecedores de la confianza de nuestros clientes, y que infatigablemente sigamos construyendo hogares, ciudades y una Venezuela cada vez más grande.